LOREAK
DE
JOSE
MARIA GOENAGA Y JON GARAÑO
Cuando
alguien se empeña en reflexionar sobre algo que no necesita de especulación
alguna, lo más usual es que aburra a
cualquiera o consiga que este se ponga en off mientras el especulador insiste
en su matraca. Esto y nada más que esto es lo que me provocó la película
Loreak, una adaptación cinematográfica de la canción de Cecilia “Un ramito de
violetas” ¿Quién le mandaba flores………?
Este
intento de convertir en obra de arte una nadería insustancial narrada de la
forma más lenta posible para poder alargar el metraje me ha producido un
aburrimiento supino. El intento de convertir la intimidad en extimidad por
medio de un simulacro de thriller en el que no se persigue a un serial killer sino a un adornador de
puntos negros de tráfico, es un experimento que mejor se hubieran guardado para
sí los directores del film.
Y
todo esto lo digo sin dejarme influir por mi natural aversión a cualquier tipo de
nacionalismo y de ensalzamiento de lo
étnico. El tiempo narrativo es muy prolongado para la historia que se pretende
relatar, lo que la hace tremendamente
lenta. Los planos eternos te inducen a desconectar de la trama. El intento de
retratar un mundo femenino, además de ser cansino, es un fiasco. No hay
comparación con el mundo masculino, no hay contrastación con las diferencias
generacionales, tampoco plantea las habituales demandas de sumisión de los hombres
Reduce el examen a las relaciones madre-suegra; marido-mujer con años de rutina
y traslada el mundo del amor platónico al entorno masculino haciendo que el
desdichado protagonista desarrolle su papel en una grúa para situarlo más cerca
de las nubes. Vamos, que el tema no da
ni para un corto, muy corto. El uso de recursos de mal gusto como la exposición
de un cadáver o apelar a una oveja misteriosa (tomando al espectador por tonto
que no comprende los mensajes encubiertos que nos quiere transmitir), no
consigue, a pesar del intento, que te internes en la narración.
En
fin, una muy mala película de la que únicamente salvaría, siendo muy magnánimo,
la banda sonora.
No
comprendo los motivos por los que nos va a representar en los Óscar. En
ocasiones siento que los académicos toman algo que no tomamos los demás.
Germán.